El Valle de la Muerte, ubicado en la frontera entre California y Nevada, ha sido históricamente el punto más caliente de la Tierra, con un récord de 56 °C en 1913. Sin embargo, este 2025 podría cambiar ese panorama. Austin, Texas, ha emergido como un nuevo epicentro de calor extremo, registrando temperaturas superiores a las del emblemático desierto estadounidense.
Esta semana, Austin alcanzó los 37.2 °C, mientras que Furnace Creek, en pleno corazón del Valle de la Muerte, marcó apenas 31.6 °C. A ello se suma un índice de calor en Texas que, por la humedad, podría escalar hasta los 44 °C, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos (NWS). La alerta de calor extremo emitida para esta región destaca el cambio climático como un factor central en este fenómeno, que podría intensificarse en los meses de verano.
Expertos han señalado que, aunque en esta época del año Austin suele registrar temperaturas cercanas a los 30 °C, este 2025 ya muestra niveles entre 6 y 8 grados por encima del promedio histórico, lo cual podría convertir a la ciudad texana en uno de los puntos más calurosos del planeta si la tendencia se mantiene.
México también arde bajo la primera ola de calor del año
Del lado mexicano, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México advirtió que la primera ola de calor de 2025 se extenderá del 15 al 18 de mayo, con temperaturas que rondarán los 31 a 33 °C en la capital, pero que superarán los 45 °C en varias regiones del país.
Los estados más afectados por esta ola de calor son:
-
Coahuila
-
Nuevo León
-
Tamaulipas
-
San Luis Potosí
-
Michoacán
-
Guerrero
Las autoridades han lanzado alertas sanitarias e instan a la población a mantenerse hidratada, evitar la exposición prolongada al sol, usar bloqueador solar y vestir ropa ligera. La intensidad de este fenómeno climático es tal que incluso zonas tradicionalmente más templadas están viendo cómo sus termómetros se disparan.
¿Un anticipo del futuro?
Tanto en México como en Estados Unidos, el aumento sostenido de las temperaturas es un recordatorio del impacto directo del cambio climático. Lo que antes se consideraban eventos extremos, hoy comienzan a ser parte del nuevo panorama climático global. De confirmarse las predicciones para julio y agosto, lugares como Austin podrían marcar un antes y un después en la historia del calor extremo.